Tiene ojos verdes como para recordarle al río su destino. Pero, sobre todo, tiene una mirada crítica que intenta capturar con su recién estrenada cámara fotográfica. Ha recorrido el arroyo Caracoles y el Morán de punta a punta para buscar entre la maleza los restos de la historia de estas aguas turbias. Casas en pie y habitadas, casas abandonadas, restos de construcciones acosadas o comidas por la selva. Es capaz de bordear el albardón hasta encontrar el lugar exacto donde se escurre la espesura que permite el desembarco. Es concienzuda, obsesiva y perfeccionista. Madre adolescente, con esfuerzo propio y apoyo familiar estudió para maestra y se le nota la vocación y el respeto en la forma que piensa esa etapa clave que es la infancia. Recorre en su pequeño bote a motor la maraña de ríos que forman el Delta del Paraná, con sol o con lluvia, para llegar temprano a clase. De a poco, como sin proponérselo, se ha convertido en los ojos de nuestro proyecto en aquellos humedales.
